sábado, 24 de marzo de 2012

Ícaro o la apuesta por la superación

El mito de Dédalo e Ícaro siempre ha inspirado a los que gustan de combinar el riesgo y la tecnología. Dédalo siempre se ha llevado la parte que calcula y analiza los riesgos, mientras que Ícaro ha inspirado la aventura y el deseo sin tener en cuenta las consecuencias. Ícaro siempre ha gozado de mejor fama entre los que se lanzan en pos de un ideal y se asocia con frecuencia a los jóvenes que desean experimentar emociones a tope, vivir por el puro placer de la vida y no tener en cuenta lo efímera que pueda ser ésta. Creo que en este mito la juventud y la inconsciencia caminan unidas y lo que se recomendaba en la Grecia antigua era saber y conocer en profundidad un tema antes de lanzarse, para adquirir la prudencia que la edad adulta considera necesaria antes de actuar. Yo destacaría sobre todo el equilibrio entre impulso y reflexión que el mito nos ofrece.

No hay comentarios: